Relacionado con el punto anterior, también resulta muy interesante incorporar en nuestro día a día alimentos ricos en beta-caroteno (β-caroteno) como el tomate o la zanahoria, y en alfa-caroteno (α-caroteno) como el kiwi o el maíz. De esta forma, la pigmentación de tu piel será mejor y gracias a las vitaminas que contienen (B y E), tu bronceado se prolongará y evitarás la deshidratación. ¿Tomas este tipo de alimentos con frecuencia?