Los anfibios como los sapos, ranas y salamandras son unos de los grupos de animales más vulnerables por su capacidad única de vivir tanto dentro como fuera del agua. Por eso, es muy preocupante que algunos están desapareciendo debido a la contaminación y a la pérdida de sus hábitats naturales.
Se estima que más de la mitad de las ranas de Europa podría extinguirse en los próximos cuarenta años.